Uno de los equipos de calefacción individual más utilizados en España es el radiador, puesto que es un emisor de calor que combinado con otro generador de calor como una caldera de condensación, una bomba de calor u otros sistemas de energías renovables, obtiene muy buenos resultados, proporcionando confort térmico de forma rápida y segura.
Qué son las válvulas termoestáticas
Uno de los sistemas para regular la calefacción y controlar la temperatura de los radiadores son las válvulas termostáticas, que son unos pequeños dispositivos que se instalan en los radiadores con el fin de regular el caudal de agua que entra en los radiadores. Su instalación siempre debe ser realizada por personas autorizadas para garantizar el correcto funcionamiento y seguridad de la instalación térmica y además, será la persona que mejor nos asesorará acerca de los precios de las válvulas y acerca de cuáles son las que mejor se adaptan a la instalación de calefacción.
En cuanto al funcionamiento y características de las válvulas termostáticas decir que existen diferentes tipos de válvulas: las manuales, que abrirán o cerrarán el caudal mediante el giro de posición del cabezal, y las válvulas termostáticas, que permiten programar la temperatura de funcionamiento basándose en la temperatura de consigna contratada, además de poder establecer horarios de funcionamiento de cada uno de los radiadores. Las válvulas con cabezal termostático o válvulas termostáticas permiten un mayor control sobre la instalación ya que las posibilidades de regulación son más amplias que con las válvulas manuales.
Regulación de la calefacción
La regulación de la calefacción mediante la instalación de válvulas termostáticas en los radiadores es un elemento clave para mejorar la eficiencia energética de los radiadores, que produce unos ahorros de energía de entre un 8 y un 13%. Su instalación en los radiadores nos permitirá:
- Mayor control sobre la temperatura de confort en la vivienda, que está considerada como una temperatura entre los 19 y 21º C. Cada radiador se puede controlar de forma individual por lo que cada estancia de la casa tendrá la temperatura necesaria sin necesidad de sobrecalentar la temperatura ambiente.
- Mayor control sobre el consumo de energía en la vivienda. En el caso de que una estancia de la vivienda no se use, será suficiente con cerrar la válvula termostática del radiador.Así evitaremos calentar un lugar de forma innecesaria, haciendo una mejor gestión de los recursos en el hogar y sin derrochar energía.
- Mejor distribución y reparto del calor en la vivienda. Las posibilidades de control de las válvulas termostáticas programables permiten hacer una gestión más eficiente de la energía.
Si estás pensando en instalar válvulas termostáticas en tus radiadores, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.