Para la población que habita las urbes o grandes ciudades la implementación de zonas verdes significa un beneficio considerable.
Pero ¿Cómo las ciudades cambian a los árboles o zonas verdes? Recientemente dos estudios muestran que no existe una calle de un solo sentido. ¿Qué queremos decir con esta frase?
Los científicos ya saben que tener acceso a zonas verdes puede mejorar nuestra salud mental e incluso reducir muertes prematuras. Otro ámbito bueno es la captación de dióxido de carbono reduciendo las emisiones.
Los nuevos estudios apoyan la idea de árboles urbanos como mejora del clima y para las personas. Pero también dichos estudios muestran que los árboles también se ven afectados por su localización en las ciudades.
Cuando plantamos árboles en zonas urbanas, debemos tener presente y considerar las temporadas o estaciones de crecimiento y como eso puede verse afectado por el medioambiente urbanita que rodea estos árboles.
Actualmente se utilizan datos extraídos de satélites de alta resolución para analizar la efectividad de los árboles urbanos y la reducción de temperatura de la superficie en comparaciones con aquellas ciudades sin espacios verdes y sin árboles.
También se ha tenido en cuenta el efecto de las ciudades hacia los árboles que habitan en ellas. Esto se ha podido llevar a cabo gracias al estudio en los colores cambiantes de las hojas en otoño y en primavera.
El cambio en los árboles cuando habitan en zonas urbanas
Se ha demostrado que las ciudades provocan o tienen dos efectos hacia los árboles.
· El reverdecimiento (primavera) ocurre 6 días antes en las ciudades que si se compara con las zonas rurales.
· Las luces artificiales en las ciudades prolongan la temporada de crecimiento de los árboles urbanos.
Ciudades con temperaturas cálidas hacen que el reverdecimiento aparezca mucho antes en las ciudades, con la consecuencia de que los arboles y su crecimiento son menos sensitivos a cambios de temperatura.
El cambio en la coloración de las hojas se debe en parte al efecto llamado islas urbanas. Esto sucede cuando las temperaturas aumentan entre 1 y 3 grados en áreas urbanas debido a la falta de más vegetación.
El impacto de las zonas verdes en las ciudades
Los árboles tienen impactos sorprendentes en la temperatura de las ciudades si estas últimas se comparan con aquellas en las que tiene muy pocas zonas vegetales. Las ciudades con mayor cantidad de vegetación consiguen una reducción de la temperatura casi cuatro veces más que en aquellas ciudades donde no existe zonas verdes.
Pero existen varios factores importantes a la hora de implementar zonas verdes en las grandes ciudades. El espacio es limitado; por ello, es necesario encontrar métodos o estrategias que ayuden a implementar zonas verdes. Hacer los edificios más sostenibles e implementar bioarquitectura en ellos.
No solo es necesario realizar un cambio hacia ciudades con mayor resiliencia, también es necesario conseguir una simbiosis que permita y mejore la calidad de vida en las ciudades y con ello haga que el impacto de la crisis climática en la que nos vemos envueltos sea o tenga un impacto menor.